EL ARBOL PROHIBIDO
Desde pequeño a los cristianos, se nos ha enseñado sobre la fruta del árbol prohibido. Pero no he podido encontrar explicación lógica y racional (aunque sé que las enseñanzas bíblicas son cuestiones de fe). La Biblia no lo dice. Los teólogos investigan sin ponerse de acuerdo, si era un árbol real o una actitud personal reservada. No faltó quien me dijera que la fruta prohibida, en sí, era la relación sexual, con todas las explicaciones de lugar, para sostener su tesis.
Buscando una respuesta más lógica me parece haberla encontrado, donde menos la esperaba, en el libro: “Las Limitaciones del Pensamiento”, de Bonnier Baehr.
Veamos el asunto por lógica: el hombre era inocente, no había nada en su mente, pero desde que este aprende a pensar, algo pasa en el paraíso. La Biblia dice: “No probar el árbol de la Sabiduría…” Cuando el hombre lo probó adquirió conocimiento y “supo lo que era el bien y el mal”. Es decir, desde que el hombre “piensa” adquiere conocimiento, distingue el Bien del Mal. No existe una fruta prohibida, sino un estado mental en el cual no se debe caer, porque entraña limitaciones y muerte.
Ubiquémonos en la Biblia: “No probar el árbol que está en medio del paraíso…”
Primero: que debemos entender por Paraíso ¿No será una figura gramatical para indicar que su cuerpo constituía su paraíso y que el centro del mismo es el cerebro, “la mente”, centro del control del cuerpo? Si es así, entonces el árbol prohibido era el pensamiento, porque desde que el hombre probó dicho “árbol” – desde que pensó – se dio cuenta del bien y del mal, adquirió: la muerte.
Segundo: En caso de que el paraíso fuese realmente un lugar terrestre, debía ser muy pequeño para que el hombre se diera cuenta del centro del mismo. Lo que nos dice que la posibilidad de que el centro del paraíso fuese el cerebro del hombre. En un circuito electrónico, o en una empresa “el centro”, no siempre está en el medio, entendiéndose como el lugar de mando. Lo que indica que lo prohibido para el hombre era su propio pensamiento.
Tercero: ¿Por qué prohíbe Dios pensar al hombre?, porque el pensamiento limita y Dios quería que no tuviera limitaciones, que fuera libre y que estuviera siempre en contacto con la Totalidad, al hombre pensar, se disgrega de la Totalidad –Dios- adquiere su personalidad falseada por el pensamiento. El hombre se dice: yo soy yo, aquel es otro; no puede detenerse a mirar todo como un conjunto, porque el pensamiento lo limita y le indica hasta donde llega él.
Al disgregarse de la Totalidad no puede ver ni sentir la realidad como antes. El paraíso ya no es su paraíso, todas las cosas están diferentes, esto porque ha creado un patrón en su mente, y todo lo que no esté de acuerdo a ese patrón, es diferente. De ahí que “No es expulsado del paraíso, sino que él se siente expulsado”, como dice Bonnie Baehr. Se siente expulsado porque no concibe el cambio, porque su pensamiento es estático, mientras la realidad está cambiando. Si no, ¿Por qué Adan, cubrió su vergüenza?, tenía vergüenza porque conocía el pecado, a través del conocimiento.
Esta ha sido la respuesta más lógica que me he podido dar del “Árbol Prohibido”.
29/1/89 s.f.m