Las Cosas del Querer
Ni el medico ha podido diagnosticar
Ni el legislador reglamentar
Ni el profesor enseñar
Ni el ingeniero construir
Ni el abogado defender
Ni el analista descubrir
Ni la ciencia limitar
Ni el meteorólogo pronosticar
Ni el futurista predecir
Ni la iglesia salvar
Ni la guerra eliminar
Ni las aguas inundar
Ni el sol aclarecer
Ni el matemático medir
Ni el filosofo descifrar
Ni el presidente gobernar
Ni el revolucionario liberar
Ni la noche oscurecer
Ni el pintor plasmar
… Sólo el poeta romántico ha podido detener su pluma y su musa y sin lastimar la molicie del ser querido, deseando llevar en cada punto, cada coma, cada punto y coma, cada espacio, cada dos puntos, cada letra, cada palabra, cada frase, cada oración, cada idea, cada párrafo y deja que siga luego del punto y aparte: “Las cosas del querer”