SENDEROS
SENDEROS
POR LA VIDA HAY QUE DEJAR SENDEROS para que nuestros hijos caminen, senderos para que nuestros retoños miren, senderos que servirán de luz imperecedera que iluminaran el andar de nuestras descendencias y servirán de trocha para el transitar de todas las futuras generaciones.
Hay senderos abiertos, hay senderos ocultos, hay senderos, cerrados, y hay senderos que jamás han sido transitados, esperando un valiente que haga una trocha, una vereda, un trillo, un caminito, tan siquiera esto es suficiente para hacer que su paso por la vida no se convierta en un sin nombre, en una estrella sin luz, en un desconocido para la humanidad.